Ella

Y acá estoy... Cagado de sueño y preguntándome cómo es posible que hasta sus medias más usadas huelan rico. En toda su perfección y en cómo carajo hace para soportarme todos los días. En la forma de sus comisuras que acompañan su risa y en el color de esos ojos.
La estoy extrañando y la última vez que la vi fue hace cuatro horas. A veces pienso que estoy demasiado obsesionado, me calma pensar en el mutuo y enfermizo, pero hermoso deseo de tenerla conmigo todo el tiempo.
Muy muy lejos, nos podríamos ir.